Un soldado muerto: anotaciones de un soldado en el desierto de la guerra. 

El día en que la tierra este frente a su reflejo  y la novia se ahogue en un río de flores, pétalos  y misteriosas perlas de sal,  
tendremos el misterio de la naturaleza frente a nuestros ojos.   Enfrentados a nuestro propio reflejo ¿Ficción? ¿Espectro? ¿Exageración? ¿Ensueño? 
En todo caso, frente a todos, el límite ,la frontera, el muro.  
Y ¿Qué pasa si vemos frente a nosotros el fin?  

– Mi alegría peregrina. – en un campo de lirios junto al piedemonte.

Un sábado a media tarde, con el viento en la cara.
A veces, sólo a veces, encuentro en la literatura la única salida que tengo para aplacar algunos dolores. Un fármaco que estimula mis ganas de ser. Un veneno que descansa en la voluntad de auto sabotearse. Un anticuerpo que combate la melancolía. De esta guerra creadora, llama ardiente que sin descanso aclara, germina mi sentimiento trágico de la vida. Uno que alienta, que exhorta e inquieta. Una guía, un lazarillo de mis tristezas. Una flor marchita en medio de un jardín de incandescentes lirios  


20/Feb/2016 – En el piedemonte llanero.

Deja un comentario